Skate 3 (ANÁLISIS X360)

| 2010-07-15 | No hay comentarios »

Tony Hawk, Rodney Mullen, Steve Caballero… Todos ellos tienen algo en común: son skaters profesionales. Si nuestro deseo es emularlos no hace falta salir a la calle a hacer el vándalo patinar, ya que tenemos Skate 3. No es exactamente lo mismo, pero es más cómodo y seguro. A continuación, mi análisis del juego:

FICHA TÉCNICA

Nombre completo: Skate 3

Género: Simulador deportivo (Skate)

Desarrolladora: Black Box

Distribuidora: EA

Plataformas: PlayStation 3, Xbox 360

Plataforma analizada: Xbox 360

Versión analizada: PAL España

Precio: 69’95 €

Edad recomendada: +16

Año de publicación: 2010

Página oficial: Skate 3

Otra información: Voces en inglés, textos en español

ANÁLISIS

La historia de este juego es prácticamente inexistente, y es que se nos propone crear un equipo de skaters con el que representar una nueva marca de tablas y así, gracias a la fama que obtengamos al completar desafíos y campeonatos, así como colaborando con skaters profesionales y realizando vídeos y fotos promocionales, vender más tablas y hacernos un hueco en el mercado. Eso sí, la presencia del entrenador Frank (personaje interpretado por Jason Lee, protagonista de Me Llamo Earl), personaje que nos enseñará lo básico para jugar, hace que éste aspecto merezca la pena… :P

El aspecto gráfico del juego es bastante irregular, y es que si bien el conjunto resulta notable, sí que hay detalles que desentonan bastante (texturas a muy baja resolución o elementos con una carga poligonal ínfima son los dos problemas que afectan más al título). Por contra, el modelado de lo personajes principales es muy correcto (y, además, podemos personalizar el aspecto del protagonista y de los miembros del equipo), el escenario es grande y detallado y los efectos son correctos.

A nivel sonoro el juego está realmente cuidado: la banda sonora es muy variada (de hecho, es casi imposible no encontrar una sola canción que no nos guste). El doblaje está realmente trabajado y, pese a estar en inglés, acompaña muy bien al juego (en entonación, énfasis… ). Los efectos sonoros también resultan muy convincentes y variados, y es que dependiendo de la zona sobre la que nos deslicemos sonará de una forma u otra (incluso suena distinto si es al aire libre o en un recinto cerrado).

Personajes destacados

Pero, sin duda alguna, la gran baza del título es la jugabilidad: el juego es un simulador (así que olvidaos de los saltos de 300 metros de altura con 15000 trucos en secuencia), para lo bueno y para lo malo. En el lado positivo tenemos un gran realismo en movimientos que nos hará sentir como un auténtico profesional del skating pero, por contra, la dificultad para realizar los trucos puede tirar para atrás a más de uno. Y, de hecho, así sería si no fuese porque en esta tercera entrega de la saga se ha facilitado todo un poco, pero se ha mantenido la esencia de simulador, y es que en esta tercera entrega se ha mejorado la ‘ inteligencia’ del personaje, que ahora es capaz de distinguir cuándo queremos grindar y se pone en posición para facilitarlo un poco (igualmente, deberemos ‘ acertar’ sobre el rail), y es que desconozco cómo era esto en la segunda entrega de la saga, pero en la primera me sigue resultando (casi) imposible grindar, mientras que en éste tercer episodio lo hago cuando y cómo quiero. Además, el tema de saltos y encadenamiento de movimientos también se ha mejorado, haciéndolo ligeramente menos exigente que en la primera entrega.

Para progresar en el juego iremos realizando desafíos de diversas clases: carreras contra otros skaters, pruebas en las que tenemos que superar la puntuación de un profesional, realizar el truco que nos piden para una foto o grabación, participar en torneos (mención especial a las llamadas ‘ Sala del Dolor’ , en las que debemos lesionar nuestro patinador cumpliendo requisitos tales como romperse un número determinado de huesos o caer de determinada altura)… Nosotros elegimos en todo momento qué prueba hacer (podemos ir ‘ manualmente’ recorriendo el mapa o aceptar los desafíos desde el menú, teletransportándonos hasta ellos. Una vez completados los desafíos ganaremos tablas e iremos desbloqueando contenido (nueva ropa y tablas para nuestros personajes, el equipo va creciendo en número de personajes controlables (llegando a un máximo de 5), obtenemos una ‘ sede’ del equipo que podemos modificar creando el skatepark que queramos, piezas para el skatepark… ).

Por si esto fuera poco, comentar que tenemos la ciudad entera a nuestra disposición. Por desgracia, ésta ciudad no invita demasiado a ser visitada (al contrario de lo que pasa en juegos como GTA IV o Saint’ s Row, en los que la ciudad tiene gran interés y pasamos muchas horas ‘ voluntarias’ dando vueltas por la ciudad) y no la exploraremos toda, sino que nos quedaremos con 4 o 5 puntos de la misma y son en los que nos dedicaremos a hacer trucos o intentaremos bajar cuestas a gran velocidad (incluso nos dedicaremos a hacer ‘ el chorra’ , pero siempre en unos mismos lugares). En la ciudad también tendremos un pequeño editor de escenario, pero muy limitado (sólo nos deja poner algunos objetos o mover algunos de los ya existentes), pero nada destacado. Un aspecto que sí merece especial mención es la posibilidad de hacer fotos y vídeos en cualquier momento con lo que veamos en pantalla, con un editor bastante completo (de hecho, todas las fotos que acompañan éste análisis, a excepción de la cabecera, han sido realizadas por mi mientras jugaba, ya sea en modo libre o en pruebas de fotografía para revistas).

NOTA

LO MEJOR

– Largo y entretenido.

– Sencillo de jugar, pero no deja de ser un simulador bastante exigente.

– Se ha mejorado el control (respecto al 1), por lo que es más sencillo hacer lo que queremos.

– Editores (de vídeo, de escenario y de personajes) completos y sencillos.

– Variedad de escenarios y pruebas.

– El entrenador Frank y sus comentarios… :D

LO PEOR

– Gráficamente irregular.

– La historia no es propiamente tal cosa, y la verdad es que se hecha en falta algo de ‘ unión’ (sentiremos que hacemos pruebas sin motivo alguno, y es que vender tablas simplemente es un objetivo).

– La ciudad no se aprovecha todo lo que se podría (no invita a ser explorada en su totalidad, y estaremos casi todo el rato en los mismos puntos).

CONCLUSIONES

Un juego que no te puede faltar si te gusta el mundillo del skating. Muy entretenido y divertido, aunque por desgracia no aproveche todo el potencial que tiene. Pese a algunos aspectos algo irregulares, es un juego muy recomendable.