Los hackers tienen un nuevo blanco en la mira: las plantas generadoras de energía y otras infraestructuras básicas de todo el mundo, cuyas operaciones quieren controlar. Esto ha hecho que se intensifiquen los esfuerzos por reforzar las medidas de seguridad de sistemas vetustos y vulnerables. Los delincuentes cibernéticos han tratado por mucho tiempo -a veces con éxito- de penetrar redes de instalaciones importantes. En julio los expertos descubrieron un código de computadoras llamado »worm» (gusano), creado específicamente para tomar el control de los sistemas que dirigen el funcionamiento interno de plantas industriales. La vulnerabilidad es probablemente más grande en países… Continuar leyendo